Al participar en un ensayo clínico de cáncer, es probable que se le realicen más pruebas que si no estuviese en el ensayo. Estas pueden incluir análisis de sangre y otros análisis de laboratorio, radiografías, estudios por imágenes y biopsias.

Biopsias

Si bien los análisis de sangre y los estudios por imágenes pueden ofrecer una idea de cómo se encuentra una persona, nada detalla los pormenores del cáncer de un individuo como su propio tejido canceroso. Las biopsias les permiten a los investigadores observar el cáncer de manera directa. Es así como pueden descubrirse las mutaciones genéticas y otras características de un tumor. Al observar las muestras de tejido, los investigadores pueden ver información sobre el tumor que puede usarse para derrotar el cáncer.

Los tratamientos para el cáncer son cada vez más avanzados, y a menudo apuntan a mutaciones específicas o buscan biomarcadores que puedan usarse para especificar los tratamientos. Por ello, a menudo se requieren muestras de tejido para saber si el tumor de un participante del ensayo tiene las características que el fármaco en estudio está diseñado para tratar.

Si bien es posible que ya se le haya realizado una biopsia antes de ingresar en un ensayo, podría ser necesario que se someta a una biopsia específicamente para los fines del ensayo. Además, posiblemente se le pida que se realice una serie de biopsias durante el ensayo para ayudar a los investigadores a observar cómo responde a la terapia en los niveles celular y molecular. Su voluntad de proporcionar biopsias resulta vital para comprender los aspectos científicos del cáncer.

El fármaco en estudio se proporciona sin ningún cargo. Las pruebas especiales que se realizan específicamente para el ensayo, como análisis de sangre adicionales, normalmente son pagadas por quienes llevan a cabo el ensayo. Otros costos relacionados con su atención se solventan tal como si usted no participara en un ensayo.

Es posible que el centro del estudio cuente con un orientador financiero o un trabajador social capaz de responder sus preguntas y darle sugerencias o acceso a recursos que podrían resultar útiles. Su médico y el personal del consultorio pueden derivarlo a diversos recursos útiles para ayudarlo en el progreso de su cáncer.

Si bien una biopsia puede brindar información valiosa sobre cómo está respondiendo en ese momento el tumor, los límites de nuestros conocimientos actuales restringen lo que los investigadores pueden evaluar y recabar a partir de su muestra de tejido. Sin embargo, esto no será siempre así. A medida que la ciencia avanza, también lo hace nuestra comprensión de lo que vemos bajo el microscopio… y en el ADN.

Las biopsias seriadas son un conjunto de biopsias que se obtienen en distintos momentos durante el transcurso de la terapia. Contar con una serie de biopsias permite determinar si un tratamiento es eficaz y cómo el cáncer cambia en respuesta a la terapia. Estos datos suelen estar entre los más valiosos que se obtienen durante un ensayo clínico.

Es importante que sepa que resguardar su privacidad es una prioridad máxima. Puede restringir el acceso a organizaciones o investigadores específicos. Además, contribuir con un banco de tejidos no afectará cuestiones tales como la capacidad de sus hijos de contar con seguro médico.

Es posible que se le pida permiso para almacenar en un banco sus muestras de tejido para que algún día pueda obtenerse más información a partir de ellas. A medida que la ciencia avanza, los investigadores pueden recuperar biopsias anteriores para continuar estudiándolas.
La ciencia progresa tan rápidamente que el almacenamiento de tejidos en bancos nos da la oportunidad de estudiar más tipos de cáncer con mayor velocidad.

Si bien algunas personas están dispuestas a que los científicos usen sus células cancerosas para cualquier investigación que pueda salvar vidas en cualquier momento, es posible que otras personas deseen poner más límites. Para ambos casos existen medidas de protección.